Reubicación de Pescadito: Un largo año más tardaría el traslado de esta invasión

2021-05-05-09:29:13 601

Entre tanto, continúan llegando nuevos habitantes que no van a figurar en el censo del juzgado administrativo. “La Policía no colabora y nosotros no podemos impedir que se sigan metiendo”: comunidad.

Una “papa caliente” tendrá en sus manos el alcalde Edgar Fernando Tovar cuando el gobierno departamental le protocolice la donación del terreno de alguito más de tres hectáreas a la Administración municipal, para que allí, según fallo de una acción popular emanado de la justicia administrativa, tenga que reubicar en condiciones dignas a más de 200 familias que hoy invaden un segmento de más de 200 metros de largo por fuera del dique en zona de alto riesgo del barrio Primero de Enero. 

Según la titular de la Secretaría de Inclusión Social, Fadía Cecilia López Díaz, la donación del predio todavía no se ha hecho efectiva por parte del gobierno departamental, pese a que la Asamblea departamental aprobó el proyecto que solicitaba la autorización al gobernador para hacer la entrega del lote de terreno de 3.3 hectáreas, el pasado mes de febrero al Municipio de Arauca.

 El titular de la Secretaría General del gobierno departamental, Jahyl Hernández, dijo a El Mirador que no era tarde todavía hacer efectiva la donación al Municipio y anotó que este mes podrá hacerse efectivo el trámite para que de ahí en adelante el señor alcalde se encargue de ultimar los detalles de reubicación.

 Esta reubicación tardará más de un año, según la profesional López Díaz, porque el sitio destinado inicialmente para una forma asociativa, necesita de un relleno que demandaría una inversión cercana a los tres mil millones de pesos y en estos momentos no hay reservas presupuestales para dicho relleno ni para levantar un programa de vivienda que supere por lo menos más de 200 soluciones.

 La invasión comenzó hace cinco años con 49 familias llegadas no se sabe de dónde y cómo ni el alcalde de la época y mucho menos la Policía le prestaron atención a la anomalía, fue creciendo lentamente hasta llegar a unos 165 tugurios de invasión, época cuando vino el primer censo manejado por el juzgado.

   

Este censo dio pie para que numerosos avivatos, muchos de ellos focalizados luego con vivienda propia, decidieran meterse a donde pudieran para quedar en el nuevo censo, acto de mala fe de delincuentes que querían quedar con otra vivienda, hecho rechazado por el juez, quien sacó del censo a los avispados, unas 16 familias que pretendían colarse.

 La presidenta de la Junta Comunal de Pescadito, Alexandra Castro reconoció que todos los habitantes de Pescadito están radicados en un predio de alto riesgo y que urge su reubicación, aclarando, que en efecto llegaron muchos más a acabar de invadir lo poco que queda del lugar, pero que nadie en el lugar podía hacer nada porque el asunto era de la Alcaldía o en su defecto de la Policía, quienes tienen las herramientas legales para impedir la ocupación ilegal de predios ajenos.

 Luego que se produzca la donación del predio, el alcalde Tovar Pedraza tendrá que tomarse la molestia de gestionar ante el Ministerio de Vivienda o el ente del Gobierno Nacional que corresponda lo que necesite para cumplir con el mandato del juzgado administrativo, cuidándose de entregar reubicaciones a delincuentes que se quieran colar.